BUENOS AIRES.- La posible negociación con los holdouts está generando incertidumbre entre los inversores. Ahora los acreedores no están confiados en que Argentina quiera evitar un default y llegar a un entendimiento con ellos.
“No creo que se presenten a la reunión de la semana que viene. Los abogados de Argentina dijeron una cosa pero ahora fueron desmentidos. Todavía no hemos escuchado nada de ellos. Pero esperamos que aparezcan”, le dijo a Infobae un vocero de los holdouts.
Tanto NML Capital (de Elliott Management) como Aurelius creen que las idas y vueltas del Gobierno pueden terminar en la nada.
“La Argentina tiene tiempo de sobra para llegar a un acuerdo con ellos. No descartan opciones, como la que trascendió con respecto a un pago en bonos: debería ser una operación como la de Repsol, que tenía negociado tomar los bonos y venderlos al JPMorgan para hacerse del efectivo inmediatamente. De todas formas, dicen los holdouts, la Argentina pueda trabajar en un menú de opciones para acercar posiciones. Los plazos que manejan estos acreedores para negociar son hasta finales de julio. Explican que, si bien la Argentina tiene un vencimiento de deuda a fin de este mes (el Discount por U$S 900 millones), no es necesario que lo pague. Y ese incumplimiento no la haría caer en default: el país tiene 30 días más de gracia para pagar esos bonos, sin caer en incumplimiento de pagos.
“Tiempo les sobra”, alegan. “Hablamos de U$S 1.400 millones y no de U$S 15.000 millones como dice la Argentina. Esa es la cantidad que está en juego ahora. Ellos ya han acordado pagar U$S 1.000 millones al Club de París, y pagaron otros U$S 5.000 millones para Repsol. Y dicen que si se cumplen las obligaciones de la Corte, de alguna manera el mundo va a desmoronarse. No es cierto”, señaló el abogado de NML, Robert Cohen, durante la audiencia con el juez Thomas Griesa. (infobae.com)